Iesus Caritas Nº 151
Presentación de la Familia
espiritual
Carlos de Foucauld
AEPS
(Instituto de Hermanos y Hermanas para el servicio)
Naturaleza:
Instituto secular
Fecha y lugar de fundación
Guiados por la luz del
espíritu Santo, tratando de responder a la llamada de Jesús «Si alguno
quiere servirme, que me siga» (Jn 12,26) y a los deseos de la Iglesia,
el Instituto que lleva el nombre ANH EM PHUNG SU (AEPS – Hermanos servidores
y Hermanas servidoras), vio la luz el 8 de febrero de 1979, animados por su
obispo y con su permiso “ad experimentum”.
En 1982, AEPS fue autorizado
oficialmente a ejercer sus actividades en la diócesis de Nha Trang.
AEPS se compone de tres ramas:
una de hombres consagrados, otra de mujeres consagradas, y otra de asociados
(célibes o casados).
Reconocimiento jurídico (fecha
y lugar)
AEPS fue reconocido como
Asociación de fieles, para convertirse en Instituto secular por primera vez
en 1994, y ser reconfirmado de nuevo por el obispo 5 años después, el 15 de
octubre de 2000.
El 2 de mayo de 1997, AEPS fue
aceptado oficialmente como miembro de la Asociación
Familia espiritual
Carlos de Foucauld.
Número actual de miembros:
AEPS tiene 70 miembros (53
hermanas y 17 hermanos, de los cuales 5 son sacerdotes). Ayudan a los grupos
étnicos en el centro del Vietnam.
Características:
Hay tres divisas en la vida
espiritual de AEPS:
- “Aquí estoy, Señor, para
hacer tu voluntad” (línea vertical)
- “Yo no he venido a ser
servido, sino a servir, y a dar mi vida en rescate por todos” (línea
horizontal).
- Y “hacer las cosas
ordinarias de manera extraordinaria”, opción por la vida ordinaria; lo que
se reduce al esquema de la Cruz: crucificarse con Cristo en la Cruz.
Se trata de vivir el Evangelio
a fondo, vivir la caridad fraternal, vivir en silencio, en la pobreza del
trabajo como Jesús en Nazaret, en la intimidad de Jesús Hostia, de vivir en
sacrificio con Jesús.
Hay un compromiso con votos
para las ramas masculina y femenina: consagración total a Dios en la Iglesia
por los votos de Pobreza, Castidad y Obediencia, disposición para la
oblación al servicio de la Iglesia, de manera silenciosa, según las
Constituciones y las disposiciones del Ordinario.
Los miembros de AEPS no viven
obligatoriamente en comunidad bajo un mismo techo, a veces viven juntos,
pero son libres para vivir en su casa.
No todos los varones son
sacerdotes. Hay hermanos laicos consagrados.
Comunitat de Jesús
Naturaleza:
Asociación privada de fieles.
Fecha y lugar
de fundación: 1968, Barcelona.
Reconocimiento jurídico:
1975, en las diócesis de Barcelona, Tarragona,
Lérida, Gerona, Jaca, Valencia y Alicante.
Número actual de miembros:
79.
Implantación en el mundo:
España, Italia.
Características:
Somos una comunidad de laicos,
nacida después del Vaticano II.
Hacia 1962, cuando nuestro
hermano Pedro Vilaplana buscaba una respuesta a la llamada de Dios, cayo en
sus manos el libro de Jean-François Six Itinerario espiritual de Carlos
de Foucauld. La espiritualidad del hno. Carlos se abrió paso en su
corazón, y le reafirmó en la idea de comenzar una comunidad al estilo de las
primeras comunidades cristianas: con espíritu de familia. En la que sus
miembros viviesen, por la amistad y el amor, una auténtica fraternidad; en
la que la oración ocupase un lugar primordial; y en la que sin tener un
apostolado específico, se hiciese verdaderamente presente a Jesús de Nazaret
en todos los ambientes.
El crecimiento de la comunidad
y sus experiencias de vida dieron lugar a que naciesen modos de actuar que
traducen en signos vivos la oración, la relectura de la vida y la concreción
de nuestra propia vocación. A partir de ahí se formaron Grupos de revisión
de vida, Hogares y Fraternidades.
GRUPOS DE REVISIÓN DE VIDA
Los Grupos de revisión de vida
son pequeños grupos que se reúnen de vez en cuando para compartir y revisar
la vida personal, con profundidad, sinceridad y exigencia mutua, a la luz
del Evangelio.
HOGARES
El crecimiento de la comunidad
nos ha llevado a la Creación de Hogares (Llars). Son lugares en los que
nosotros, los miembros de la comunidad, nos reunimos para celebrar la fe,
compartiendo la liturgia de la Palabra y la Eucaristía, la oración
comunitaria, nuestros compromisos de vida y de trabajo en la sociedad,
nuestras ocupaciones cotidianas, nuestras inquietudes y nuestras tareas
comunitarias.
El hogar (“llar”) es un
espacio donde se expresa nuestra realidad comunitaria. Un lugar de acogida y
oración, abierto a todos los que se acerquen a compartir la amistad y la
oración. Es un lugar para conocerse y experimentar el espíritu de amistad
fraternal.
FRATERNIDADES
Las fraternidades manifiestan
otro aspecto importante de nuestra vida.
Algunos de nosotros,
comprometidos dentro el espíritu de la comunidad, tras un proceso de
maduración personal, hemos escogido una opción concreta para nuestra vida y
nuestra vocación; unos se han orientado hacia una vida de celibato, viviendo
en comunidad con otros hermanos. Otros, escogen vivir su seguimiento de
Jesús en una vida de matrimonio. Las dos opciones establecen las dos
vertientes de la comunidad.
Las fraternidades son un signo
con el se quiere hacer presente la vida de Nazaret. En las fraternidades,
sea en la fraternidad de celibato (con vida en común), o en cada matrimonio,
se intenta vivir un espíritu de familia, abierto a la disponibilidad y a la
hospitalidad, acogiendo y respetando a todo ser humano. Una vida de trabajo
y oración plenamente encarnada en el ambiente en el que le ha sido dado
vivir a cada cual. una vida en la que la presencia de Jesús de Nazaret da
sentido a todo.
Esta vida de comunidad, que
nos ayuda a encontrar la presencia misteriosa y profundamente humana de
Dios, manifestada en Jesús de Nazaret, nos empuja a dar una respuesta
personal ante nuestro ambiente y ante la sociedad en general; nos ayuda a
insertarnos en ellos plenamente, aportándonos un equilibrio humano y
espiritual.
«Somos una comunidad
activa-contemplativa. Estas dos palabras no son separables, sino que forman
una unidad. Se llaman la una a la otra .Somos contemplativos porque
descubrimos la necesidad de una relación profunda con Cristo, para poder
llamarnos cristianos; en esta relación toda nuestra vida, de manera gradual
e inconsciente, se transforma en oración. Esto, que es lo que nos une más
íntima y profundamente, nos impulsa a una acción diversificada según
nuestros carismas personales.» (Pedro Vilaplana)
Para llegar a esto, creemos
que son esenciales:
En la Comunidad de Jesús, no
tenemos una tarea común específica, sino que la comunidad integra y apoya
las distintas preocupaciones que sus miembros quieran asumir,
individualmente o como grupo, porque el impacto de la comunidad en la
sociedad dependerá de las acciones concretas n las que nos comprometamos
individualmente y como grupo. De este modo, todos juntos, casados, célibes y
comprometidos, intentamos ser testigos y presencia viva del amor de Jesús
entre los que nos rodean.
Fraternidad Carlos de Foucauld
Naturaleza:
Asociación de fieles.
Fecha y lugar de fundación:
7 de agosto de 1991.
Reconocimiento jurídico:
1º de diciembre de 1999.
Historia:
Nuestra Asociación de Fieles “Fraternité Charles
de Foucauld”, comenzó en 1991. Todas éramos miembros de la Fraternidad Iesus
Caritas, pero nosotras no queríamos convertirnos en Instituto Secular.
Preferimos poner el acento en nuestra consagración bautismal, sin añadir
otros votos. Tenemos un compromiso específico de celibato, siguiendo a
Jesús.
El equipo internacional intenta trabajar
corresponsablemente, sin pensar en jerarquías.
Insistimos en la igualdad de dignidad entre todos
los miembros de la fraternidad, lo cual no quiere decir igualdad de
funciones.
Cada cuatro años, la Asamblea General
Internacional se reúne para hacer balance de lo que se ha vivido, abrir
perspectivas de futuro y elegir nuevo Equipo Internacional.
Número actual de miembros:
329, más 16 simpatizantes.
Implantación en el mundo:
República Sudafricana, Ruanda, Argentina,
Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, México, República Dominicana, Uruguay,
Canadá, Alemania, Inglaterra, Austria, Bélgica, España, Francia, Irlanda,
Portugal.
Características:
modo de vida:
Somos laicas que vivimos
nuestra entrega a Dios en lo cotidiano.. Ejercemos profesiones muy
distintas, según la preparación y la opción de cada una. Muchas de nosotras
viven solas, otras en familia, sobre todo en algunos países. Una vida sobria
y sencilla. Compartimos con todo el pueblo de Dios los compromisos sociales
de todo el mundo.
La fraternidad
se reúne cada mes y nos exige una formación permanente.
compromiso:
Nos
comprometemos al celibato; a la vida de Fraternidad (revisión de vida,
corresponsabilidad, hacernos cargo....) y es la Fraternidad, célula de
Iglesia, la que recibe nuestro compromiso; a vivir la evangelización por la
amistad en nuestro entorno y a ser testigos con nuestra vida de la gratuidad
del amor de Dios, que nos llama a la unidad; a vivir en solidaridad con los
pobres, los excluidos, los difíciles, los que están solos o enfermos.
aspectos
esenciales:
Intentamos
vivir la contemplación en la vida de cada día. Por eso es muy importante
para nosotras la oración prolongada.. La meditación de la Palabra de Dios,
la comunicación en las reuniones de fraternidad, nos ayudan a entender mejor
los acontecimientos, y a vivir bien el espíritu de las Bienaventuranzas.
La
universalidad, aspecto esencial de nuestra fraternidad, nos abre a otras
culturas, religiones y costumbres. El respeto a los derechos del hombre y de
la mujer, la justicia, la paz y la no-violencia, el esfuerzo para que la
democracia en nuestros países sea real y no formal, el ecumenismo y el
diálogo con otras religiones y, en fin, la salvaguarda de la naturaleza,
son, en este momento, los retos que comprometen a la F.C.F.
Fraternidad Iesus Caritas
Naturaleza:
La Fraternidad Iesus Caritas
(FJC) es un instituto secular femenino católico. Reúne mujeres solteras o
viudas de todos los países, razas y lenguas y de todos los medios sociales,
que deseen vivir una consagración definitiva en respuesta a la llamada del
Señor en su condición seglar.
Fecha y lugar de fundación:
1952, en Ars (Francia).
Reconocimiento jurídico:
de derecho
pontificio, 8 de diciembre de 1999.
Historia:
La FJC nació en Ars en marzo de 1952, a partir de un encuentro entre el P.
Voillaume, Margarita Poncet y algunas laicas que querían realizar este
proyecto de vida. Fue reconocida como de derecho pontificio el 8 de
diciembre de 1999.
Número actual de miembros:
230.
Implantación en el mundo:
Estados Unidos,
Venezuela, Argentina, Brasil, Chile Perú, Ecuador, México, Francia España,
Italia, Polonia, Alemania, Suiza, Ucrania, Eslovaquia, Bélgica, Turquía,
Rusia, Vietnam, Corea del Sur, Malasia, China, Australia, Cuba, Martinica,
Burkina Faso, Camerún, Centroáfrica, Isla Mauricio, India.
Características:
La FJC quiere vivir el
espíritu de las Bienaventuranzas, el compromiso para construir un mundo más
fraternal, que sustituya a un mundo fragmentado, a una sociedad cada vez más
anónima e indiferente. En medio de estas contradicciones, la opción por una
vida laica consagrada quiere dar testimonio del Evangelio destacando
- el reto de la gratuidad
sobre la eficacia;
- el reto de la confianza
sobre la desconfianza y el miedo;
- el reto de la fidelidad
sobre la relatividad;
- el reto del abandono en Dios
sobre el éxito a cualquier precio.
Queremos manifestar la ternura
de Dios en el mundo de hoy, para que por encima de la división de clases, de
naciones y de razas reine la unidad de su Amor. Lo cotidiano teje nuestra
vida familiar, profesional, social. Generalmente vivimos solas.
Respondiendo a la llamada e
Dios, que nos ha amado primero, la consagración que nos vincula a la Iglesia
según los estatutos de la FJC abarca a la persona en su globalidad:
La vida de Fraternidad
La fraternidad se vive a
partir de pequeños grupos que se reúnen durante 24 horas, cada mes,
aproximadamente. Los momentos esenciales son:
- el de compartir la Palabra
de Dios;
- la revisión de vida, que
permite discernir juntos, con la ayuda del Espíritu Santo, el camino de cada
uno, respetando su vocación personal;;
- la adoración prolongada.
Estas fraternidades se agrupan
por regiones, animadas por una regional y su consejo. Los retiros anuales y
los encuentros internacionales ensanchan el corazón a un amor universal.
Durante 2 años se proporciona
una formación a las que comienzan. De ahí sale el deseo de una formación
permanente.
La relación personal con Jesús
se alimenta en la meditación del Evangelio, la celebración Eucarística, la
adoración prolongada del Santísimo Sacramento, los tiempos de desierto
vividos en soledad.
Pedimos al Señor que a pesar
de nuestra debilidad, siguiendo las intuiciones de Carlos de Foucauld
lleguemos a «gritar el Evangelio con toda nuestra vida.».
Fraternidad Sacerdotal
Naturaleza:
Asociación sacerdotal privada internacional.
Fecha y lugar de fundación:
Le Tubet, 1951.
Reconocimiento jurídico (fecha
y lugar): 25 de
abril, 2002. Roma.
Historia:
La Fraternidad sacerdotal
nació en Francia, en torno a un grupo de sacerdotes, 1951, con el nombre de
Union Sacerdotale. En 1976, después del Concilio Vaticano II, se
cambió el nombre por el de Fraternidad Sacerdotal Iesus-Caritas.
Número actual de miembros:
3500.
Implantación en el mundo:
Burkina-Faso, Camerún
Centroáfrica, Congo-Brazzaville, Kenya, Madagascar, Níger, R.D. Congo,
Tanzania, Argelia, Egipto, Marruecos, Argentina, Brasil, Chile, Colombia,
México, Canadá, Estados Unidos, Bangladesh, Corea del Sur, India, Indonesia,
Pakistán, Filipinas, Sri Lanka, Alemania, Inglaterra, Austria, Bélgica,
España, Francia, Hungría, Irlanda, Italia, Malta, Polonia, Portugal, Suiza,
Ruanda.
Características:
modo de vida:
Somos sacerdotes diocesanos (a
excepción de algunos religiosos) que quieren vivir su vida y su ministerio a
la luz del mensaje de Carlos de Foucauld, permaneciendo insertados en el
presbiterio diocesano. Nos reunimos mensualmente, en general,
en pequeñas
fraternidades para compartir nuestra vida, la reflexión y la oración común.
El hecho de
inspirarnos en el Hno. Carlos que quería ser «hermano universal» nos lleva a
una vida sencilla, con frecuencia cercana a las personas a las personas
marginadas en la sociedad y en la Iglesia.
La inspiración
foucauldiana se traduce también en los numerosos contactos internacionales:
cada seis años los delegados de todo el mundo se reúnen para elegir entre
ellos al responsable general.
compromiso
Nuestro
compromiso principal sigue siendo el de la ordenación sacerdotal.. No
obstante, algunos, tras un tiempo de pertenencia a la Fraternidad, desean
expresar su voluntad de vivir plenamente el espíritu de Carlos de Foucauld
como sacerdotes seculares con un compromiso formal, anteriormente llamado
«consagración». Este compromiso se hace la mayoría de las veces al final de
un retiro o de un “mes de Nazaret”.
aspectos
esenciales
Deseosos de
vivir, como el Hno. Carlos, la intimidad con Cristo y la fraternidad con los
hombres y mujeres de hoy, intentamos apoyarnos y estimularnos en nuestra
vida de sacerdotes en los encuentros mensuales de fraternidad, en los que
hacemos revisión de vida a partir del Evangelio y de un tiempo de adoración
y de desierto. El “mes de Nazaret” es un tiempo privilegiado para descubrir
e integrar el carisma de la fraternidad.
El deseo de
vivir como hermanos universales nos lleva a menudo a vivir con la población
marginada y a cuidar las relaciones con los que son diferentes por su
cultura, religión o nacionalidad.
Fraternidad Secular Carlos de
Foucauld
Naturaleza:
Reconocida como Asociación de fieles en distintas diócesis.
Fecha y lugar de fundación:
1955, en Francia.
Historia:
Carlos de Foucauld pensaba en
los laicos para su obra, especialmente en los países del Tercer Mundo.
Al final de la guerra de
1939-1945, la familia espiritual de Carlos de Foucauld se desarrollaba y se
organizaba.
Una multitud de pequeños
arroyos fluyendo desde todos los rincones de Francia convergen para formar
un río. Así se podría describir el nacimiento de la Fraternidad Secular. El
crecimiento del número de miembros requiere la redacción de un nuevo
Directorio, que, a su vez, progresivamente, se va haciendo más la fuente de
un espíritu a vivir que un reglamento de normas concretas..
La Fraternidad es reconocida
canónicamente como “pía unión” en 1950 por Mons. de Provenchères. Al
principio se llamó “Fraternidad Carlos de Foucauld”. En 1955 toma el nombre
de «Fraternidad Secular Carlos de Foucauld». Es un movimiento plenamente
autónomo y el más numeroso de la Familia espiritual de Carlos de Foucauld.
Número actual de miembros:
6000
Implantación en el mundo:
Benin, Burkina-Faso, Burundi.
Camerún, Kenya, Madagascar, Niger, R.D. Congo, Ruanda, Sierra Leona,
Tanzania, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba,
Ecuador, Haití, México, Perú, Uruguay, Venezuela, Canadá, Estados Unidos,
Argelia, Egipto, Líbano, Irak, Jordania, Corea el Sur, India, Japón,
Pakistán, Filipinas, Sri Lanka, Vietnam, Australia, Alemania, Inglaterra,
Bélgica, España, Francia, Irlanda, Italia, Malta, Países Bajos, Polonia,
Portugal, Suiza.
Características:
modo de vida:
La fraternidad secular reúne
mujeres y hombres (en ciertos países también jóvenes) de cualquier origen
étnico, de todos los medios sociales y de estados de vida distintos. Los
niños no son automáticamente miembros de la Fraternidad, Pero es del todo
importante estar muy atentos a sus necesidades. y no olvidarlos.
Ejercemos profesiones muy
distintas, según la preparación y opciones de cada cual. Intentamos llevar
una vida sencilla que es una alternativa a la sociedad de consumo, una vida
abierta a los demás, sobre todo a los pobres y abandonados que nos rodean.
compromiso
Cada miembro de la fraternidad
vive sus compromisos personales tanto en la sociedad como en la Iglesia
siguiendo sus propios carismas. Los comparte en la fraternidad, donde puede
revisarse, interrogarse a la luz del Evangelio. Estos compromisos, vividos
desde la apertura a los demás y con espíritu de servicio son un modo de
solidaridad para con los más abandonados. La variedad y las diferencias de
los compromisos de cada uno, son una de las riquezas de la fraternidad.
Sin embargo algunas veces la
fraternidad toma postura ante algunos problemas de la sociedad (p. ej., los
sin-papeles, la condonación de la deuda de los países pobres, cuestiones de
paz, de discriminación...)
En algunos países se plantea
la cuestión de si es necesario un compromiso (promesa). Ya hace mucho tiempo
se decidió en la Fraternidad que este tipo de compromiso no debe de ser una
obligación. Sin embargo puede ser útil un signo que exprese la seriedad de
la decisión de un miembro de la fraternidad.
aspectos esenciales
Tenemos la gran suerte de
vivir encuentros ecuménicos con protestantes, anglicanos, ortodoxos,
miembros de los ritos orientales, y de entrar en un diálogo interreligioso.
Generalmente se trata de
grupos pequeños, de 3 a 15 miembros, que permiten una comunicación real de
lo vivido, que se reúnen mensualmente, pero el ritmo de las reuniones se
determina en la fraternidad y depende de las necesidades y posibilidades de
cada grupo. Es importante que los miembros puedan vivir sus compromisos
profesionales, de barrio, asociativos... El encuentro de fraternidad debe
ser para todos una realimentación, no una sobrecarga añadida.
Los hermanamientos entre
fraternidades de distintos países o continentes subrayan la dimensión
universal de la Fraternidad y nos ayudan a crecer mutuamente en el respeto
al espíritu de Carlos de Foucauld.
Grupo Carlos de Foucauld
Naturaleza:
Asociación de fieles
Fecha y lugar de fundación:
1923, en París;
1924 en Tlemcen (Argelia).
Reconocimiento jurídico:
1925 (París); 1950 (Bône, Argelia); 1963 (Avignon).
Historia:
En 1922 Suzanne Garde, con dos
amigas, fundó una asociación llamada Groupe Charles de Foucauld
(Grupo Carlos de Foucauld) y abrió en Tlemcen una escuela de hogar para
jóvenes musulmanas. Tras la independencia de Argelia, en 1962 el grupo se
trasladó a Bon-Encontre, cerca de Agen, ocupándose de la acogida de personas
con dificultades.
Número actual de miembros:
2.
Implantación en el mundo:
Francia.
Características:
El Grupo Carlos de Foucauld es
una pequeña Asociación de laicos consagrados que se inspirn en la vida de la
Sagrada Familia en Nazaret.
Anteriormente estábamos en
Argelia. Hubiéramos deseado vivir concretamente el Apostolado de la
Presencia, y hemos compartido los sufrimientos de nuestros vecinos. Nos
hemos convertido en la familia de las personas que están solas. Hemos criado
más de una treintena de niños.
Estos niños llevan ahora una
vida de adultos responsables. Deseamos mantener con todo respeto las
relaciones con cada uno de ellos, y normalmente asumimos el papel de
abuelos de sus hijos.
En la Parroquia, participamos
todos los días en la Eucaristía y nos alimentamos de la Palabra.
Durante los meses de verano
desarrollamos una actividad de acogida en “Plambel”. Mantenemos estrechas
relaciones, familiares, con nuestros amigos asiáticos, gentes de paso,
Israelitas, familias originarias de Argelia, de Italia, etc.
Hermanitas de Jesús
Naturaleza:
Congregación religiosa.
Fecha y lugar de fundación:
1939, Argelia.
Reconocimiento jurídico:
Febrero de 1964 (derecho pontificio)
Historia:
La Fraternidad de las
Hermanitas de Jesús se fundó en Argel el 8 de septiembre de 1939. Ese día,
Magdeleine Hutin, junto con Anne Cadoret, pronunció sus votos privados ante
el representante de su obispo, Mons. Nouet. Desde entonces va a llamarse
Hermanita Magdeleine de Jesús.
Era el final de una larga
espera, marcada por pruebas de familia y una salud frágil, que le impedía
hacer proyectos de futuro. Fue una época marcada también por una confianza
ciega en Dios. Durante este período descubre la biografía de C. de Foucauld,
escrita por René Bazin En ella encuentra su camino: «El Evangelio vivido, la
pobreza total, la inmersión entre las gentes más abandonadas... Y, sobre
todo, el amor en plenitud... Le suplicaba al Señor que apresurase la hora de
mi partida a tierras del Islam, hacia el Sahara... para encontrar allí las
huellas de del hto. Carlos de Jesús, y llevar la misma vida.»
Pero no es hasta 1936 cuando
se embarca con destino Argelia con su madre y una joven, Ana. En Boghari,
viven en un barrio árabe. Atienden a los pobres para curarlos, organizan una
sopa popular y realizan algunas giras entre los nómadas. Pronto se ven
desbordadas, y al cabo de dos años, Magdeleine siente que Dios la llama a
«una vida... contemplativa, mezclada con el mundo musulmán para hacer
presente allí al Señor... y llevarles, por encima de la ayuda material, la
certeza de Su Amor».
Con ocasión de una
peregrinación a El Golea, conoce al P. Voillaume, y el obispo del Sahara
Mons. Nouet la invita a ir a su diócesis. Más tarde, él la orienta en su
deseo de tomarse un tempo oración para prepararse, proponiéndole un
noviciado canónico y la profesión religiosa. Es él también quien le pide que
redacte una constituciones, y así es como se convierte en fundadora a pesar
suyo, aunque siempre había tenido deseos de una vida religiosa.
En octubre de 1939, parte para
el Sahara con la hna. Ana. A propuesta del obispo, toma la decisión de
comenzar una fraternidad en Touggourt. Esta primera fundación verá nacer una
profunda amistad entre hta. Magdeleine y sus vecinos musulmanes; albañiles,
sedentarios y nómadas; amistad que marcará profundamente el nacimiento de la
Fraternidad: «Fundé la Fraternidad con ellos», le gustaba decir.
En marzo de 1946, Mons.
Mercier pide a la hta. Magdeleine que cierre temporalmente Touggourt, para
dar lugar a que la joven congregación vaya a formarse en El Abiod, cerca de
los hermanitos, con la ayuda del P. Voillaume. Esta decisión, muy dolorosa
para hta. Magdeleine, conducirá a una estrecha colaboración con el P.
Voillaume, que durará toda su vida.
En julio de ese mismo año, en
la Sainte Baume (santuario de la Santa Cueva), «se apodera de ella
una gran luz»: la Fraternidad, consagrada hasta entonces exclusivamente a
los hermanos del Islam, se hace universal, y se extenderá por el mundo
entero Se abre por entonces al Oriente, y a las Iglesias orientales, para
derramarse pronto por todos los continentes.
Número actual de miembros:
1270.
Implantación en el mundo:
Afganistán, Albania, Alemania,
Argelia, Argentina, Armenia, Australia, Austria, Bélgica, Brasil, Burkina
Faso, Camerún, Canadá, Chile, China/Hongkong, Corea del Sur, Croacia, Cuba,
Dinamarca, Egipto, España, Etiopía, Filipinas, Finlandia, Francia, Grecia,
Groenlandia, Hungría, India, Inglaterra, Irak, Irán, Irlanda del Norte,
Israel, región de Palestina, Italia, Japón, Jordania, Kenya, Líbano, Libia,
Marruecos, Martinica, México, Níger, Nigeria, Noruega, Países Bajos,
Pakistán, Papúa, Perú, Polonia, Portugal, R.D. Congo, Rep. Eslovaca, Rep.
Checa, Rep. de Ucrania, Ruanda, Servia-Montenegro, Siria, Sudáfrica, Suecia,
Suiza, Tanzania, Túnez, Turquía, Uruguay, U.S.A., Alaska, Vietnam.
Características
modo de vida:
Vivimos nuestro
“Nazaret” en pequeñas fraternidades de 3 ó 4 hermanitas en un medio popular,
compartiendo en todo lo posible las condiciones de vida de nuestros vecinos,
el trabajo, la vivienda, en solidaridad de destino con un pueblo, un medio,
compartiendo en lo que nos es posible sus alegrías, sus pruebas, su
esperanza.
compromiso:
aspectos
esenciales:
Nuestra vida
contemplativa, vivida en plena masa humana, tiene como fundamento la
Encarnación: después de Jesús, no se puede separar lo humano de lo divino.
Para nosotras,
la puerta de entrada es el misterio de Belén, Dios que se revela en la
impotencia y la debilidad de un recién nacido: «Sed un signo de la
ternura de Dios... un rayo de luz y de esperanza en medio de un mundo de
injusticia y de violencia» (Hta. Magdeleine, febrero 1983).
Queremos
descubrir el rostro del Señor en el encuentro con el otro, la escucha de la
Palabra, la adoración, dejando modelar nuestras vidas por la Eucaristía,
Sacramento de Su amor, que nos vincula desde lo más profundo de nuestro «ser
en Cristo» con la suerte de la humanidad, con la que compartimos el pan de
la fatiga y el vino de la alegría.
Esta misión de
anunciar con toda nuestra vida el misterio de Belén la recibimos en la
Iglesia, y la vivimos en comunidad, donde tenemos que aceptarnos mutuamente,
con nuestros dones y talentos, nuestras debilidades y nuestras faltas,
volviendo a empezar cada día. En las diferencias de nuestros orígenes,
nuestros modos de pensar, nuestras culturas, Jesús es nuestra unidad
Hermanitas del Evangelio
Naturaleza:
Congregación religiosa.
Fecha y lugar de fundación:
1º de diciembre de 1964, por René Voillaume.
Reconocimiento jurídico:
1979, en Grenoble, como Congregación religiosa de derecho diocesano.
Historia:
La fundación de las Hermanitas
del Evangelio es la convergencia de varias fuentes, alimentadas en Carlos de
Foucauld a su manera, como un fermento que trabaja los corazones, los del P.
Voillaume, de Hta. Magdeleine, de las Hermanitas de Jesús, de un grupo de
jóvenes de Bélgica y de jóvenes de las «Fraternidades Jóvenes Carlos de
Foucauld», que habían oído la llamada de Carlos de Foucauld, pero sobre todo
las llamadas de la Iglesia, de los pueblos marginados o abandonados, las
minorías (indios Ye’cuana de la selva amazónica de Venezuela; tribus de la
montaña de Mora, en Camerún). La convergencia de todas estas fuentes es lo
que dio origen a las Hermanitas del Evangelio. Aunque la intuición estaba
clara en el pensamiento y en el corazón de todos al principio, ha hecho
falta un tiempo largo de maduración para que se encarnase realmente en la
vida de las fraternidades y en cada hermanita.
Número actual de miembros:
70.
Implantación en el mundo:
Francia, Italia,
Camerún, Madagascar, Haití, Venezuela, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos.
Características:
modo de vida:
vivimos en pequeñas
comunidades de estilo sencillo, compartiendo codo con codo la vida con sus
alegrías y sus penas y el destino de los hermanos y hermanas pobres de
nuestro entorno (por medio de nuestro trabajo, nuestra vivienda, nuestro
lugar de inserción).
Viviendo entre hermanas de
distintos países y culturas, queremos dar testimonio (incluso con nuestras
debilidades) de que la fraternidad universal, signo del Reino, es posible.
Estamos llamadas a vivir este
doble movimiento: ir hacia Dios, con el tiempo que le está reservado
(oración de adoración, meditación de la Palabra de Dios, retiro, desierto,
acento puesto en la Eucaristía como centro de nuestra espiritualidad), con
una mirada contemplativa sobre el mundo; y otro movimiento por el que
estamos inmersas en el mundo, prioritariamente en el de los pobres de los
que somos solidarias.
compromiso:
Nuestra
vocación es contemplativa y apostólica. Seguimos la invitación de Jesús a ir
al mundo entero, para compartir la riqueza de la Buena Nueva. Nos sentimos
parte activa de la misión de la Iglesia, en especial de la iglesia local en
la que se inserta la fraternidad. Según las necesidades de las personas o de
los pueblos los acompañamos en su camino de fe, y colaboramos para que
nazcan comunidades cristianas de base, donde la Palabra de Dios es fermento
de transformación de nuestra vida según los valores evangélicos.
Nuestro
apostolado se basa en la amistad, la cercanía, y el compartir con la gente
de nuestro entorno, dentro del respeto y la ayuda mutua con los marginados y
los heridos por la vida. Trabajamos juntos para que se concrete el mensaje
liberador de Jesús, a fin de que haya más humanidad, más paz, más justicia
en nuestra sociedad (participación en proyectos de promoción humana).
Nuestros votos
de pobreza, castidad y obediencia nos ayudan a ser libres y gozosas al
servicio de los menos favorecidos.
aspectos
esenciales:
Como nuestro
nombre indica, queremos hacer de la Palabra de Dios, y especialmente del
Evangelio, nuestro alimento cotidiano, y compartirla con entusiasmo con los
que tienen sed de ella o los que aún no la conocen.
Y sobre todo en
los ambientes donde aún no se conoce a Jesús, asumimos responsablemente el
trabajo de aprender la lengua del pueblo, de conocer su cultura con sus
valores y aspiraciones, con vistas a un trabajo profundo de evangelización.
Queremos llegar
también a los que están lejos de la Iglesia, con la gratuidad del amor, y
hacer de nuestras fraternidades lugares «donde reposa el amor»
(Constituciones, nº 37), donde se acoge a todas las personas heridas y
pisoteadas en su dignidad, que aspiran a ser amadas.
Hermanitas de la Encarnación
Naturaleza:
Congregación.
Fecha y lugar
de fundación:
6 de agosto de 1985, en Hinche (Haití).
Historia:
Las Hermanitas
de la Encarnación son una asamblea pública de fieles erigida por Mons.
Pétion Léonard Laroche, de la diócesis de Hinche (Haití).
Fueron
fundaddas por la Hna. Emmanuelle Victor y el Hno. Francklin Armand en el
espíritu de Carlos de Jesús, el 6 de agosto de 1985, en Pandiassou,
(diócesis de Hinche, Haití).
Su objetivo es
la evangelización y promoción humana de los campesinos, con la divisa
«Hacerse campesino con los campesinos, a causa de Jesús y de su Evangelio».
La sensibilidad femenina de las hermanitas les lleva a que su trabajo sea
complementario del de los Hermanitos, y a dirigirse especialmente a las
mujeres del medio rural, en el terreno de la agricultura, la salud y la
educación.
En el momento
de la fundación eran 6 hermanitas, hoy son 28.
Número actual
de miembros:
28 hermanas: profesas, novicias, postulantes y aspirantes.
Implantación en
el mundo:
Haití.
Características
modo de vida:
Inserción en el
mundo rural.
compromiso:
Promoción y
evangelización de los campesinos
aspectos
esenciales:
Hacerse
campesino con los campesinos, a causa de Jesús y de su Evangelio.
Hermanitas de Nazaret
Naturaleza:
Comunidad de vida evangélica.
Fecha y lugar de fundación:
15 de agosto de
1966, en Gante (Bélgica).
Reconocimiento jurídico:
21 de septiembre de
1992
Historia:
Inspiración: Hermano Carlos y
Mons. Cardijn..
El Cardenal Cardijn dio a la
primera generación de Hermanitas una manera de ver al hombre, al mundo,
especialmente al mundo de los obreros, y a la Iglesia. De él aprendimos:
«Ver, juzgar y actuar». Hemos descubierto, desde su visión, el valor
innegable e irreemplazable de la amistad, de la relación y del trabajo
solidario. El alejamiento de Dios y de la Iglesia constatados en el interior
del mundo obrero después del Vaticano II, siguen siendo una llamada
imperativa a presentar al mundo el rostro de una Iglesia pobre, acogedora y
disponible.
En Carlos de Foucauld y en su
espiritualidad reconocemos nuestra vocación a la vida religiosa: Nazaret,
la normalidad de lo cotidiano; ser servidor sin excluir a nadie y en
solidaridad con los más pobres.
Número actual de miembros:
46.
Implantación en el mundo:
Bélgica, Francia, España,
Venezuela, Líbano.
Características:
Nazaret: Nazaret es el corazón
de la espiritualidad.
Nazaret define nuestro modo de
vida como fraternidad: ese es nuestro primer apostolado. Nazaret es una
llamada a vivir el amor apasionado por la persona de Jesús, tanto en las
situaciones ordinarias como en las situaciones «extraordinarias», a ejemplo
de Jesús. Debemos recibir del mismo Jesús esta vocación «de ser apóstol».
Sólo mirando a Jesús con frecuencia y largo tiempo de manera contemplativa
aprendemos a mirar a los hombres con Su mirada, y a vivir plenamente la
solidaridad con los pobres, la gente insignificante, los hombres heridos,
sin excluir a nadie. Con ellos y como ellos, queremos compartir el trabajo y
la inseguridad; y nos ponemos a su servicio a través de nuestro trabajo.
Nazaret nos envía al desierto
de la ciudad, hacia un pueblo y un medio, nos enseña cómo ser una comunidad
de fe evangélica y acogedora hacia fuera..
La hospitalidad es para
nosotras un deber sagrado que a menudo nos exige ir más allá de nuestras
fuerzas. Acoger con respeto y sinceridad requiere una escucha, una entrega
gratuita y un gran respeto a cada persona: «Todo hombre es un hijo de Dios,
digno de que demos la vida por él» (Card. Cardijn).
Lo que “somos” será siempre
más importante que lo que “hacemos” o “decimos”; para ser interiormente
libres para “el otro”, hay que estar a su lado y escuchar: una manera
contemplativa de servir.
Una hermanita vive en comunión
con los demás por la presencia de Jesús y por el Sí que pronuncia con María,
con temor. De cada fraternidad, de cada Nazaret puede nacer para el mundo un
signo nunca visto, un mensaje no oído nunca: «Mirad cómo se aman».
Hermanitas del Corazón de Jesús
Naturaleza:
Congregación.
Fecha y lugar de fundación:
27 de noviembre de 1977, en Bangui (Centroáfrica).
Reconocimiento jurídico:
julio de 1988, en Bangui, RCA.
Historia:
La Fraternidad de las
Hermanitas del Corazón de Jesús nació el 27 de noviembre de 1977, en pleno
corazón de África, a partir de seis jóvenes procedentes de cuatro diócesis.
Buscaban una vida según el Evangelio con un espíritu común y en plena masa
humana.. Se encontraron entonces con la herencia espiritual del P. de
Foucauld, que respondía exactamente a sus aspiraciones, en el seguimiento de
Jesús de Nazaret. Esta fundación fue una gran alegría para los Obispos y la
Iglesia de Centroáfrica, deseosa de ver nacer algún día en su tierra
congregaciones religiosas autóctonas. El 27 de noviembre de 1977, la seis
primeras Hermanitas del Corazón de Jesús pronunciaron sus votos en el
iglesia de Ntra. Sra. de África, en Bangui.
Número actual de miembros:
22.
Implantación en el mundo:
República Centroafricana.
Características
modo de vida:
Como religiosas
autóctonas y testigos privilegiados de las señales de crecimiento de nuestro
pueblo, así como de sus sufrimientos, intentamos vivir la vida consagrada e
igualmente las intuiciones evangélicas del Hno. Carlos con nuestra
sensibilidad de mujeres africanas, en:
- la fidelidad
a la dimensión de una presencia orante entre la gente:
- la atención
especial a los más desheredados y nuestra cercanía a ellos;
- la
disponibilidad para responder a las interpelaciones provenientes de nuestro
medio y de la Iglesia local;
- suscitar en
nuestros pueblos el sentido del desarrollo y la promoción de los pobres;
- la
purificación de los valores africanos de la acogida;
- distintas
actividades: visita a los presos, a las personas mayores, niños
deficientes,, familias ciegas a causa de la oncocercosis, enfermos de SIDA.
Cualquier servicio en favor de las personas en desgracia;
- formación de
las «mamás Eucaristía», mujeres dignas que llevan la comunión a los enfermos
aislados.
compromiso:
«A causa de
Jesús y de su Evangelio», nos comprometemos libremente por medio de los
votos religiosos de Castidad, Pobreza y Obediencia a seguir a Jesús con todo
nuestro ser, como Iglesia, para anunciar al Salvador y ser signo del Reino
que viene.
aspectos
esenciales:
«Amaos los
unos a los otros como yo os he amado». Tratamos llevar una vida
fraternal, en grupos de tres o cuatro Hermanitas, en la obediencia, la
alegría, pues la vida fraternal es una Buena Nueva. Diariamente vivimos la
Eucaristía, la Adoración, la contemplación de la Palabra de Dios, la acogida
y el humilde servicio cotidiano para ganarnos la vida. Viviendo en medio de
Pueblos desgarrados por las crisis políticas, económicas y sociales, nuestra
existencia querría ser portadora de este mensaje de esperanza: Dios ama a
todos los hombres.
Hermanitas del Sagrado Corazón
Naturaleza:
Congregación de derecho pontificio.
Fecha y lugar de fundación:
1933, en
Montpellier (Francia)
Reconocimiento jurídico:
Como congregación
diocesana, en 1947, en Montpellier; como Congregación de derecho pontificio,
20 de noviembre de 1980.
Historia:
Las Hermanitas del Sagrado
Corazón nacieron en Agosto de 1933.
El canónigo Dupin, presidente
de la Asociación Carlos de Foucauld, confía a una viuda belga, que se
llamará Hta. Marie-Charles, la fundación de las Hermanitas del Sagrado
Corazón, según la Regla de 1902 escrita por C. de Foucauld.
Se reúnen varias jóvenes en
Mazes, lugar próximo a Montpellier. Desde sus comienzos la fraternidad está
marcada por la internacionalidad: Bélgica, Alemania, Grecia, Argelia y
Francia.
En aquel momento su marco de
vida era monástico; vivían en retiro, practicando la acogida y la
hospitalidad. Intentar seguir a la letra lo más posible el Reglamento, pero
el espíritu que contiene, que llevó a C. de Foucauld de la Trapa a
Tamanrasset, las pone en movimiento. Se abren fraternidades en Túnez,
Argelia, la India, Marruecos...
Pero es partir del concilio
Vaticano II cuando las hermanitas van a encarnar y expresar su vida
contemplativa en medio del mundo, según las intuiciones de C. de Foucauld, y
a entrar en contacto más estrecho con otros pueblos y otras culturas que
serán, con la Eucaristía, sus lugares de contemplación.. El espíritu del
Reglamento, la vida y los escritos de C. de Foucauld son la fuente de
inspiración de su vida religiosa, tanto en los comienzos como en su
evolución.
Número actual de miembros:
36.
Implantación en el mundo:
Francia, España, Argelia,
Túnez, Mali, Bolivia.
Características
modo de vida:
Vivimos en
pequeñas fraternidades en los países, con los que están en situación
precaria. Queremos hacer legible y accesible a todos nuestra relación con
Dios en los tiempos de oración y en nuestra relación fraternal con los que
sufren, y en nuestros encuentros con todos.
compromiso:
Nuestra oración
es nuestro primer compromiso por nuestros hermanos y por el mundo entero
(oración personal y adoración, 2 horas diarias, y oración comunitaria).
Mirando a Jesús, y a C. de Foucauld, vemos a todo hombre como un hermano.
Queremos llegar a las personas más desfavorecidas por la sociedad, y
nuestros votos de pobreza, castidad y obediencia están marcados por toda
esta compañía.
Vivimos en
solidaridad de destino con una Iglesia y un pueblo. Y al mismo tiempo
queremos ser un lugar de diálogo y de acercamiento entre personas y culturas
diferentes. Estamos marcadas por la dinámica de lo provisional en relación
directa con nuestra misión contemplativa: «Todo se pasa. Sólo Dios basta».
aspectos
esenciales:
Sostener la
esperanza en la oración, a partir de nuestra pobreza personal con todos los
que padecen en un camino de humanidad. En una vida comunitaria sencilla, de
tipo familiar, donde hay a un tiempo apoyo, reposo y soledad. En el trabajo,
o en el voluntariado, según las posibilidades, queremos parecernos a Jesús
de Nazaret y a las que viven en las mismas condiciones (el trabajo debe
dejar siempre tiempos gratuitos para Dios solo).
Nuestro estilo
de vida, nuestra vivienda están marcados por la sencillez, la sobriedad, los
pueblos con los que vivimos.
Queremos
aprender la lengua, el modo de hacer y los valores de los pueblos a donde
somos enviadas.
Hermanos de Jesús
Naturaleza:
Congregación.
Fecha y lugar de fundación:
1933, El Abiod Sidi Cheij (Argelia)
Reconocimiento jurídico (fecha
y lugar):
19 de marzo, 1936 (por el
obispo del Sahara)
13 de junio de 1968 (Roma,
derecho pontificio)
Historia:
En septiembre de 1933, cinco
jóvenes sacerdotes franceses (entre ellos René Voillaume) se trasladan al
Sahara (Argelia) para vivir «según el espíritu de Carlos de Foucauld», con
un estilo de vida exteriormente parecido a la vida monástica, pero que
quiere estar abierto y entregado a los vecinos del pueblo llamado El Abiod,
que son musulmanes.
En 1947, los hermanos
comienzan a vivir en pequeñas fraternidades en ambientes populares, por todo
el mundo. Este cambio es fruto de los años de vida y reflexión en el
desierto; y también de la profundización en los escritos del Hno. Carlos, de
la experiencia de la guerra (Mundial II) y de una búsqueda realizada en
diálogo con otros grupos de personas cercanas (la JOC, Hta. Magdeleine, y
muchos otros). El espíritu con el que los hermanos se lanzan a este género
de vida queda explicado por el libro En el corazón de las masas, que
aparece en 1950.
Número actual de miembros:
235.
Implantación en el mundo:
Camerún, Isla Mauricio,
Nigeria, Tanzania, Argelia, Marruecos, Egipto, Irán, Israel, Líbano,
Turquía, Siria, Argentina, Brasil, Chile, Cuba, México, Nicaragua, Canadá,
Estados Unidos, Corea del Sur, India, Japón, Pakistán, Filipinas, Vietnam,
Alemania, Inglaterra, Austria, Bélgica, Croacia, España, Francia, Hungría,
Italia, Países Bajos, Polonia, Portugal, Suiza.
Características:
modo de vida:
Pequeñas
fraternidades de 2 ó 3 hermanos, implantadas en ambientes populares,
tratando de acercarse lo más posible al nivel y estilo de vida (vivienda,
trabajo) de la gente del medio en el que estamos (y también por el esfuerzo
para comprender desde dentro y hacer nuestro el modo que tienen las gentes
de vivir la fe y de mirar la vida y los acontecimientos).
compromiso:
Comprometidos a
vivir como hermanos
- con Jesús,
poniéndonos a su escucha para recibir su mirada sobre el mundo y tratar de
responder a su amor:
- con la
gente, buscando con ellos los caminos de una vida más humana, y aprendiendo
de ellos;
- con los
hermanos de comunidad, para concretar nuestro esfuerzo por construir un
mundo fraternal (vivir juntos, perdonar, valorar las diferencias...)
aspectos
esenciales:
La Iglesia nos
ha reconocido como una fraternidad con una vida contemplativa que le es
propia, hecha de compartir la condición social de los que no tienen “ni
nombre ni influencia”, y de la adoración a Cristo entregado como alimento
para la vida del mundo. Intentamos hacer de nuestra inserciones y de las
relaciones que se crean, un camino de auténtico encuentro del «rostro humano
de Dios» en Jesús de Nazaret..
Hermanitos de la Cruz
Naturaleza:
Asociación de vida consagrada monástica.
Fecha y lugar de fundación:
8 de junio de 1980, S. Gabriel de Valcartier (Canadá).
Reconocimiento jurídico:
5 de mayo, 1980, Québec (Canadá).
Número actual de miembros:
8.
Implantación en el mundo:
Canadá.
Historia y carisma:
Los Hermanitos de la Cruz
forman una comunidad de monjes, reconocida canónicamente como Asociación
consagrada de vida monástica. Fueron fundados en 1980 por un sacerdote
canadiense, el P. Michel Marie de la Cruz (Michel Verret, 1939-1997). Su
carisma consiste en la contemplación y la imitación de la vida de Jesús en
Nazaret. En el corazón de su existencia monástica está la adoración diurna
del Smo. Sacramento, inseparable del Oficio salmodiado en el coro. No tienen
apostolado exterior, pero acogen en su hospedería hombres y mujeres que
quieran vivir un tiempo de retiro y de silencio, teniendo además la
posibilidad de ser acompañados espiritualmente.
compromiso:
Los Hermanitos de la Cruz pronuncian votos
perpetuos de castidad, pobreza y obediencia, después de haber pasado
sucesivamente por las etapas de conocimiento, postulantado, noviciado y
profesión temporal. En la múltiple traición monástica y del Hno. Carlos, su
vida encuentra la unidad en la vida de adoración y de trabajo, en presencia
de la Sagrada Familia y en la acogida a todo peregrino que se presente a la
puerta del monasterio.
ecumenismo y universalismo:
Como discípulos del hermano universal, los
Hermanitos de la Cruz han recibido también de su fundador la misión de orar
especialmente por la unidad de los cristianos. En su liturgia integran
elementos de la oración de sus hermanos orientales, acogiendo la iconografía
como un tesoro de la Iglesia indivisa. En unión con Jesús, María y José, la
vida de familia de los hermanitos les lleva a trabajar, sobre todo por medio
de la oración y la entrega de su vida, por la reunión de todos sus hermanos
humanos en la única familia de Dios.
Hermanos del Evangelio
Naturaleza:
congregación religiosa.
Fecha y lugar de fundación:
Fundados el 18 de julio de
1956 en la diócesis de Aix-en-Provence (Francia) por René Voillaume, bajo la
responsabilidad del Obispo del lugar, Mons. de Provenchères.
Reconocimiento jurídico:
13 de junio de 1968, por el
obispo de Aix-en-Provence (Francia).
Las Constituciones actuales
fueron aprobadas el 5 de enero de 1986, por el Cardenal Danneels, Obispo de
Malinas-Bruselas, lugar de la fraternidad Central.
Historia:
La primera fraternidad de los
Hermanitos del Evangelio vio la luz en Camargue, sur de Francia, en 1956,
por impulso de René Voillaume y de Mons. de Provenchères, Arzobispo de Aix-en-Provence.
Pronto se fundaron fraternidades por todas partes, algunas tomando el relevo
de los Hermanos de Jesús.
A partir del recorrido y de la
reflexión de los hermanos, a partir de las aspiraciones de personas de los
distintos ambientes en los que están insertos, se ha ido definiendo poco a
poco el estilo de la misión evangelizadora de los hermanos del Evangelio:
caminar con los hombres y las mujeres compartiendo la fe y el anuncio del
Evangelio, en una vida de comunidad fraternal, de oración, de inserción y de
relación compartida.
Número actual de miembros:
85.
Implantación en el mundo:
Tanzania, Kenya, Argelia,
Camerún, España, Italia, Francia, U.S.A., Nicaragua, México, Venezuela y
Bolivia.
Características
modo de vida:
Vivimos una
vida de comunicación fraternal varios hermanos juntos, procedentes de
culturas y países diferentes. Compartimos la vida ordinaria de nuestros
vecinos y trabajamos con ellos para ganarnos la vida y para construir un
mundo mejor: eso es para nosotros vivir el misterio de la vida de Jesús,
hijo de Dios, en Nazaret. En el corazón del mundo, queremos vivir una vida
contemplativa cuyos momentos fuertes son la oración en común y la
Eucaristía. Nuestra manera de vivir está marcada por el gusto por la
sencillez y sobriedad, un espíritu de apertura y de acogida universal y la
búsqueda de humanidad en nuestra relaciones.
compromiso:
Nuestra vida
está animada por un soplo apostólico con el deseo profundo de compartir la
“Buena Nueva” de Jesús con los “pequeños”, los excluidos y los olvidados de
nuestro mundo. Este anuncio de la Buena Nueva adopta distintas formas según
el medio en que vivimos (testimonio, participación en la promoción humana,
dedicación pastoral a comunidades, comunidades cristianas de base, acogidas
para reuniones y retiros...)
aspectos
esenciales:
Nuestra vida se
apoya en tres “pilares”: la vida de oración (personal y comunitaria), la
vida fraternal y el compartir de la vida con los “pobres”. Está marcada por
la comunicación de nuestra fe en Jesús y por una proclamación de su
Evangelio. Queremos «gritar el Evangelio desde los tejados» (C. de
Foucauld) con toda nuestra vida y en nuestros distintos compromisos.
«Nuestras
fraternidades se ponen al servicio de la Iglesia local para dar testimonio
del Reino de Dios, proponer un camino de Reconciliación, trabajando así por
la Unidad de todos los hombres, anunciar el Evangelio de Dios para que cada
cual pueda abrirse en él con libertad y acoger los sacramentos de la
salvación» (constituciones, 1.8).
Hermanitos de la Encarnación
Naturaleza:
Congregación
Fecha y lugar de fundación:
26 de diciembre de 1976
Reconocimiento jurídico:
Hinche, Pandiassou,
Haití.
Historia:
Los Hermanitos de la
Encarnación fueron fundados por el Hno.
Francklin
Armand en Dospalais (diócesis de Hinche, Haití), en el espíritu de Carlos de
Foucauld, el 26 de diciembre de 1976. La asociación pública de fieles fue
erigida como Instituto Religioso de Derecho Diocesano por Mons. Pétion L.
Laroche, obispo de Hinche (Haití), el 20 de enero de 1997.
En el momento
de la fundación eran diez hermanitos.
Su objetivo es
la evangelización y promoción hmana de los campesinos, con una divisa:
«hacerse campesino con los campesinos a causa de Jesús y de su Evangelio»
De su
proximidad en el trato con la población nacen actividades de desarrollo en
la dinámica de «hacer con» (salud, eduación, agricultura, etc.).
Número actual de miembros:
35: profesos,
novicios y pre-postulantes.
Implantación en el mundo:
Haití, Santo
Domingo.
Características:
modo de vida:
inserción en el mundo rural.
compromiso:
inserción y evangelización.
aspectos esenciales:
Promoción:
hacerse
campesino con los campesinos a causa de Jesús y por su Evangelio
Piccoli fratelli di Iesus Caritas
Naturaleza:
Congregación.
Fecha y lugar de fundación:
15 de octubre de 1969, en Spello, Italia.
Reconocimiento jurídico:
6 de noviembre de 1997 en
Foligno, Italia, como congregación religiosa.
Historia:
Los hermanitos de Iesus
Caritas fueron fundados por Giancarlo Sibilia en la diócesis de Foligno, (Umbria),
tras un largo recorrido. Aceptados por el obispo Siro Silvestri en 1969,
tuvieron un primer reconocimiento canónico en 1982, y fueron aceptados como
Instituto de vida consagrada el 6 de noviembre de 1997. A lo largo de todo
este proceso, fueron acompañados por numerosas personas, entre ellas, en el
seno de la Familia espiritual de C. de Foucauld, el P. René Voillaume, Hta.
Magdeleine y Carlo Carreto, y en el plano de la Iglesia local por diversos
obispos italianos. Los Hermanitos de Iesus Caritas fueron admitidos en la
Asociación Familia Espiritual Carlos de Foucauld en abril de 1984, en la
Asamblea de Le Tubet (Aix-en-Provence) bajo la presidencia de Mons. de
Provenchères.
Viviendo el Evangelio según
las intuiciones de C. de Foucauld, encuentran su especificidad en la vida
fraternal y la amistad entre ellos –primer anuncio del Evangelio- y una vida
compartida con todo el mundo de su entorno, con especial predilección por
las diferentes pobrezas del medio que les rodea. Se dedican con plena
libertad al anuncio del Evangelio, en la escucha de la Palabra de Dios,
acompañados por la Eucaristía celebrada y adorada; se trata de los dos
aspectos que caracterizaron la vida y el espíritu de Carlos de Foucauld,
monje misionero. Tratan de vivir todo esto plenamente insertados en la vida
de la Iglesia local.
Número actual de miembros:
20.
Implantación en el mundo:
Italia, Israel.
Características:
La congregación de Hermanitos
de Iesus Caritas está formada por hermanos que evocan la divisa foucauldiana
«Iesus Caritas», inspirándose en el mensaje espiritual de C. de Foucauld. Es
el lugar donde aprendemos juntos a orar, y a la luz dl Evangelio nos
preguntamos cuál es el camino trazado por el Señor para cada uno.
La Comunidad se presenta como
signo y anuncio de que en Jesucristo se puede hacer real la utopía del
amor.
Los Hermanitos de Iesus
Caritas dedican su vida al amor a Dios y a todos los hombres, a la
obediencia a los consejos evangélicos, a la oración continua por la Iglesia
local, la Iglesia universal, por todos los hombres, especialmente por los
pobres y por los que aún no conocen el Evangelio.
Todo esto, insertos sin
reservas en la comunidad diocesana, en comunión con el obispo, los
sacerdotes, los diáconos y todo el pueblo de Dios. La Comunita construye el
ritmo de su jornada cantando la liturgia de las horas, con el compromiso del
trabajo manual o del servicio a la Iglesia diocesana, y tiempos de silencio
y períodos de soledad.
Los Hermanitos de Iesus
Caritas publican una revista trimestral de espiritualidad foucauldiana: «Famiglia
Carlo de Foucauld – Iesus Caritas» en lengua italiana y se ocupan de
otras publicaciones dedicadas al mensaje espiritual de Calos de Foucauld.
Los Hermanitos de Iesus
Caritas ofrecen su fraternal hospitalidad a todos los gustan de compartir
con ellos algunos días de silencio y oración, para buscar el designio de
Dios en su propia vida.
Unión – Sodalidad
Naturaleza:
Asociación de fieles.
Fecha y lugar de fundación:
1909, Fundación de
la Unión (diócesis de Viviers, Francia).
Reconocimiento jurídico:
1986, por Mons.
Derouet, obispo de Arras, Francia.
Historia:
Carlos de Foucauld vivió una
espiritualidad profunda en la soledad, primero en Nazaret antes de ser
sacerdote, y luego en el Sahara. Murió muy solo. Conoció también una gran
soledad interior durante los siete años que vivió en la Trapa:
efectivamente, aunque es allí donde vivía, no se sentía “de la Trapa”. No
hay que olvidar tampoco la soledad en que estuvo durante los doce años que
vivió como incrédulo, de los 12 a los 28 años; ni su soledad durante la
exploración de Marruecos; ni su soledad en el apartamento de la calle
Miromesnil antes de su conversión. Finalmente, y esto es muy importante para
nosotros, C. de Foucauld conoció una inmensa soledad interior, una noche de
la fe, durante los diez últimos años de su vida. En esta soledad y, a través
de ella, en la comunión de los santos, -comunión muy secreta y discreta, muy
interior y poco visible- es donde nos arraigamos, quienquiera que seamos: en
la Unión-Sodalidad, efectivamente, hay sacerdotes seculares, laicos,
religiosos y religiosas, obispos, etc., personas todas marcadas por esta
soledad espiritual, nómadas en búsqueda constante de la Vida Trinitaria.
La Unión-Sodalidad es una
sociación privada de fieles, es «la más humilde de las afiliaciones
foucauldianas» -por emplear la expresión de Louis Massignon (1883-1962)-
quien quería expresar así el hecho de que nosotros no tenemos ningún signo
visible de fraternidad. Pero su proyecto fue madurando durante largo
tiempo.. Comienza con las conversaciones de Massignon con Carlos de
Foucauld, el intercambio de correspondencia, la noche de adoración que
pasaron juntos en el Sagrado Corazón de Montmartre el 22 de febrero de 1909.
Se concreta en la única fundación del «hermano universal», la
Unión de hermanos y Hermanas del Sagrado Corazón de Jesús, que contaba
con 49 miembros en el momento de su muerte, entre los que estaba el mismo
fundador. Años más tarde, en la reunión de todas las “familias” del P. de
Foucauld que hubo en Beni-Abbés en 1955, Massignon fue reconocido como
responsable de un pequeño grupo cuyo número podía contarse con los dedos de
la mano. A partir de los años 60 le sucede el actual coordinador, el P.
Jean-François Six.
Hay que señalar que fue Louis
Massignon quien rescató los proyectos del Hno. Carlos tras su asesinato; fue
él quien pidió a René Bazin que escribiese la biografía que causó tanto
impacto, primero en Francia. Louis Massignon editó el Directorio
(texto de 1909, con los añadidos de 1913 hechos por el Hno. Carlos), primero
en 1917 en el Instituto francés de El Cairo, y luego en París en 1928 y
1933. En 1957 René Voillaume, fundador de los Hermanitos de Jesús y de los
Hermanitos y Hermanitas el Evangelio, hizo una adaptación del texto para uso
de las Fraternidades seculares del Hermano Carlos de Foucauld. En ese
sentido se puede decir que Louis Massignon es un eslabón esencial entre su
amigo Foucauld y las fraternidades que nacieron veinte años después de su
muerte.
Número actual de miembros:
1000.
Implantación en el mundo:
53 países
Características
modo de vida:
Los miembros
son los bautizados, en igualdad fraternal: sacerdotes, laicos, obispos,
casados, solteros, en diáspora, “misioneros aislados” (C. de Foucauld).
compromiso:
Personal, en
una estructura flexible, renovable cada año.
aspectos
esenciales:
Vivir Nazaret,
allí donde uno esté, una existencia evangélica, según los consejos de Jesús.
Vivir, en la Eucaristía, la fraternidad con Jesús y con todos nuestros
hermanos los hombres. Cada miembro se apoya en los hermanos y hermanas de la
Unión-Sodalidad: es una unión de oraciones y de acciones, en la Comunión de
los Santos.